lunes, 25 de enero de 2010

Anecdotario

Era un sábado de Junio de 2008, eran mas o menos las 10:30 de la mañana, estaba terminando una llamada telefónica desde mi celular, iba muy distraído, alcance a ponerme los audífonos de un MP3 que llevaba conmigo, cuando de pronto y sin darme cuenta, paso un tipo, chaparrito, cabello corto, con botas, me rebasó.

De pronto, vi que se volteaba hacia mi, pensé que iba a preguntarme nada, me quite uno de los audífonos para escucharle, cuando me di cuenta que sacaba de su bolsa, una pistola, corto cartucho y me apuntó.

Fueron quizá un par de minutos, que a mi se me hicieron horas, no llevaba conmigo mas que un celular, un MP3 y $300,00 en mi cartera, y un delincuente tuvo a bien apuntarme con una arma, afortunadamente, Dios no quiso que saliera una bala de esa pistola, y a partir de ese día es uno de esos recuerdos que seguramente no borraré de mi cabeza.

Coincidentemente, otro sábado, 4 de Agosto, pero de 2007, uno de mis hobbies, el programa de radio, me daba la oportunidad de estar a nivel de cancha, en el Estadio Cuauhtémoc, en el primer partido del Puebla FC en su regreso a la Primera División.

En esa ocasión, La Franja recibía a mi equipo de toda la vida, el América, al que sigo desde que tengo 6 años, es decir, hace ya muuuucho tiempo.

Pude, como comente anteriormente, ver el partido a nivel de cancha, el resultado, un empate a cero, un encuentro trabado, peleado en media cancha y digno de inicio de campaña.

Al final del partido tenia una misión que cumplir, el mayo de mis hijos, sabe de fútbol, y por consiguiente es americanista, y quería regalarle un banderín firmado por la mayoría de los jugadores del equipo.

Uno a uno traté de cazarlos, casi todos fueron accesibles a mi petición, hasta el momento en que me tope con Alejandro Arguello, en aquel tiempo integrante del América, que de manera bastante descortés accedió a firmar el suvenir.

Su actitud fue por demás grosera, y con desplante de crack, algo que esta muy lejano de ser.

Detrás de él, a unos cuantos pasos, venia Salvador Cabañas, que presenció la escena con Arguello, me acerqué, le pedí que firmara la bandera, y de manera muy educada accedió, y al estar estampando su firma, volteó, y me dijo: “fue un partido complicado, disculpa la mala respuesta de Alejandro, esta tenso”

Lo único que alcance a decir fue “gracias” y sonreí, curiosamente, aún con la bandera en las manos, alcanzo a llamar a Rojas y le dijo: “firma aquí”, la dejo en su manos y dijo “buenas noches” y se enfiló al camión del equipo.

Hoy por la mañana desperté con la noticia de que había recibido un balazo, lamentable hecho.

Estoy de acuerdo, a diario muchas personas sufren la inseguridad en las calles, y al no ser figuras públicas, muchas veces sus casos quedan en el olvido y no son resueltos y los responsables siguen en las calles buscando nuevas victimas.

Hoy, como ser humano deseo que Cabañas salve este trance tan complicado de su vida, mas allá de lo deportivo, que en este momento es lo que menos interesa.

Nos vemos luego

viernes, 22 de enero de 2010

Cambios

Llevo 10 meses haciendo cambios en mi vida, muchos de ellos necesarios, muchos también por gusto, lo que si es seguro es que todos han sido benéficos.

Marzo del año pasado fue el inicio de muchos de estos cambios, quizá hubiera querido hacerlos en otras circunstancias, pero bueno, al fin y al cabo nadie tiene una bola de cristal como para saber en que momento la vida te va a cobrar muchas de las facturas que tienes pendientes.

Regrese a lo “básico”, a los amigos de verdad y no a los amigos por conveniencia, o por moda, es verdad que uno comete una serie de estupideces cuando se siente medianamente bien con una situación diferente, pero no siempre analizamos a profundidad nuestras decisiones, y su consecuencias, menos.

Eso si, me di cuenta de que hay cosas que construí que siguen en pie, y que estaban ahí, y en los momentos complicados se acercaron sin invitación de por medio, con el compromiso intacto, con el cariño sincero, y la estima fresca.

Empecé a recibir noticias desagradables demasiado rápido, en 7 días –del 21 al 28 de Marzo- muchas, muchas cosas me habían caído encima, muchas de ellas no tuve tiempo de digerirlas, muchas de ellas, siguen siendo parte de mi diario de vida.

He necesitado mucho tiempo para acomodarme a tantas cosas, sobre todo porque no imagine que me pasaran, no a estas alturas de mi vida, pero insisto, eso de la bola de cristal no existe.

Este ejercicio de tratar de escribir me esta cayendo de lo mejor, 10 minutos para plasmar ideas, y perpetuarlas mas allá de mi cabeza son una excelente práctica, además, seguramente habrá a quien le distraiga de un día tedioso y leer estas líneas le ayude a distraerse un poco de sus problemas, ojala, de verdad, ojala, así sea.

Hoy comienzo una serie de cambios necesarios, nada del otro mundo, disciplina pura, y ganas de estar mejor, con muchas ganas de ver la luna de hoy y el sol de mañana.

Nos vemos luego

miércoles, 20 de enero de 2010

Vivo

¿Por qué “vivo”?, bueno, simplemente porque desde Marzo de 2009, después de una serie de acontecimientos que quizá en algún momento escribiré, lo mejor que ha podido pasarme es: estar Vivo.

Un poco de historia, tengo 38 años –modelo 71- no es la primera vez que me adentro a un blog, hasta hace poco más de un año, era un habito semanal, una cuestión de trabajo, colaborando con un grupo de comunicadores poblanos.

Poblano por nacimiento, Americanista por convicción, Acerero por añadidura, Laker por admiración, Barcelonista por gusto, y Tijuanense por adopción.

Alguna vez estudié Contaduría Pública, no termine la carrera, ¿las razones?, varias, pero a pesar de todo no me arrepiento de tal decisión.

Mi padre intentó inculcarme la lectura, y bueno, en buena parte tuvo éxito, no leo todos los libros que debería, pero cuando uno me interesa no ceso en el empeño de leerlo, sea cual sea el tema.

En 1993 conocí de cerca los medios de comunicación, y ya no pude escaparme de ellos, mi pasión por el basquetbol, y la oportunidad de colaborar en un proyecto periodístico en Tijuana, fueron el pretexto perfecto para que iniciará mi andar en este ámbito.

Aclaro, como siempre lo hago, que no soy un comunicador, soy un tipo que ha tenido la suerte de poder colaborar en periódico, radio, revista y televisión independiente, en la mayoría de los casos, por puro gusto, y lo voy combinando con un trabajo llamémosle “formal”.

Actualmente me divierto con un programa de radio semanal –deportivo- donde realmente disfruto los 60 minutos que puedo comunicarme y platicar de un tema que me apasiona, así como también colaboro con una revista de publicación mensual, con una columna meramente basquetbolera.

La política es uno de esos temas que traigo en los genes, me involucre en el tema desde los 15 años, mas o menos, viví de cerca una elección “desde adentro”, primero con los tricolores, y en años mas tarde, con los azules, fue ahí donde me di cuenta que no estaba yo para ser militante, me gusta enterarme, opinar y a muchas veces, muchas, criticar y proponer.

Hace un par de meses @AliciaAlarcon, me recordó que los blogs son algo así como un relax en medio de el ajetreo y el estrés cotidiano.

Lo pensé mucho, pero últimamente mi andar por Twitter me hizo reavivar esta práctica que alguna vez fue cotidiana.

Así que, bueno, este es el “re-inicio” de algo que fue un hobbie, un descanso, y que hoy retomo con la única intención de contar lo cotidiano, y que por ahí algo de lo poco o mucho que sepa de algo, pueda ayudar a quien me haga favor de leer este espacio.

¡Bienvenidos!, nos vamos a divertir.